Chile: Primer país de América Latina en generación de remesas familiares
Según cifras del Banco Central, en el 2021 las remesas personales marcaron un récord llegando a US $2.894 millones, es decir, US $912 millones más que en 2020. Aunque en realidad el volumen de envíos es mayor, ya que las estadísticas no muestran cientos de millones de dólares en envíos que se efectúan por canales informales.
Durante estos últimos años ha habido una desaceleración en la llegada de inmigrantes a Chile por motivos como la pandemia, el cierre de fronteras y un mayor control migratorio. Pero lo que no se ha detenido es el aumento de envíos de dinero a sus países de origen.
«Las remesas constituyen un aporte gigante para las familias en los países de origen de decenas de miles de migrantes que residen en Chile. Estos envíos son parte fundamental de su economía familiar, por lo que saber administrar este recurso es de suma importancia para poder sortear la crisis económica de cada uno. Y se ha detectado que existe una gran cantidad de personas que por diversas razones no pueden hacer uso de los canales formales», explica Alex Pereira, CEO de PMI Américas (https://pmi-americas.com/es), Fintech enfocada al envío internacional de dinero.
Según cifras del Banco Central, en 2021 los envíos de dinero al extranjero marcaron un récord, llegando a US$ 2.894 millones, es decir, US$ 912 millones más que en 2020, con un alza de un 45,9%. Siendo enviados, en su mayoría, por ciudadanos colombianos, con US$627 millones (31,6% del total); peruanos, con US$374 millones (18,9% del total), y haitianos, con US$287 millones (14,2% del total).
«Desde 2017 Venezuela es la comunidad con mayor presencia en Chile. De hecho, según datos de la Encuesta Casen de 2020, hay 490 mil venezolanos residentes en el país. Por lo tanto, con estos antecedentes, se podría pensar que esa comunidad encabezaría la lista de remesas salientes, pero no hay registros de aquello, porque el Banco Central refleja solamente las operaciones realizadas a través de canales formales» advierte Pereira.
Las razones de este fenómeno se deben, principalmente, al control cambiario y la hiperinflación en este país, no siendo rentable que los inmigrantes envíen dinero a sus familiares por esta vía, optando por canales informales como, por ejemplo, amigos o conocidos que se quedan con un elevado porcentaje del dinero como ganancia.
Si bien es cierto que enviar dinero por canales informales puede ser más sencillo, con las apps es más rápido y conveniente, evitando costosas comisiones y riesgos de seguridad de datos.
Los obstáculos que existían antes han comenzado a disminuir, gracias a los aportes de la comunidad venezolana fuera del país, brindando un gran beneficio a la economía. Esto se traduce en que las barreras de ineficiencia cambiaria se empiezan a desmoronar y es, con toda seguridad, que los canales formales apoyados en tecnologías digitales a corto plazo terminen beneficiando a estas comunidades.
Los canales formales, entidades bajo la supervisión de la U.A.F. (Unidad de Análisis Financiero), ofrecen al consumidor más transparencia y opciones de pagos al beneficiario, ya sea un depósito bancario en moneda local o dólares, y/o entrega de efectivo en moneda local o dólares. Además, por medio de aplicaciones digitales tanto en línea como móviles, facilitan al usuario la investigación en tiempo real del tipo de cambio más atractivo, asegurando que sus seres queridos reciban lo máximo posible de cada remesa.