China Desacelera y El Planeta Debería Estar Preocupado
La guerra entre los dos gigantes del comercio mundial aún no termina por resolverse y los datos que surgen del litigio amenazan con generar una recesión mundial más grave de la prevista.
La última información indica que la enorme industria de exportación de China entró en territorio negativo, luego de que el valor de los bienes enviados desde el gigante asiático al resto del mundo cayeran más de un 4% en diciembre, en comparación con el mismo período del año anterior.
Los datos, que fueron dados a conocer este lunes por el gobierno chino, representan el peor desempeño mensual para el sector exportador de China en más de dos años, y el primer descenso interanual desde marzo de 2018.
Esto se da en el marco del arancelamiento de los Estados Unidos aplicado a productos chinos por valor de 200.000 millones de dólares, proceso que se inició en septiembre.
Los analistas dicen que aún no hay una fuerte caída anual (tomando todo 2018 frente a 2017) porque como buena parte de las trabas iban a aplicarse desde enero (luego fueron suspendidas hasta marzo), muchos de los importadores estadounidenses se apresuraron a comprar productos chinos para anticiparse al arancelamiento.
Todos los ojos de los responsables del comercio mundial están puestos ahora en marzo, cuando las dos economías más grandes del mundo se vuelvan a reunir para, probablemente, llegar a un acuerdo. Se trata del final del período de 90 días establecido por los Estados Unidos y China en diciembre pasado para acordar los términos de intercambio.
Pero hay más preocupaciones en China más allá de las tarifas de Donald Trump. Las exportaciones a otros países (además de los Estados Unidos) también se desaceleraron, lo que, según los expertos, es debido a que la economía global en su conjunto se está enfriando.
Hay señales de esta realidad en China: el crecimiento cayó a su nivel más bajo desde la crisis financiera de 2008 en el trimestre finalizado en septiembre, mientras que otros indicadores como los beneficios industriales y la inflación encendieron sus respectivas alarmas.
En paralelo, hay que recordar que el Banco Mundial dio un informe pesimista sobre el crecimiento global. El FMI también advirtió que la guerra comercial afectará el crecimiento de Estados Unidos y China en 2019.
Otro dato que preocupa en China (y en el resto del mundo): Japón y Alemania, dos de los mercados de exportación más grandes del gigante asiático, reportaron contracciones económicas en el tercer trimestre.
Automóviles en baja
Las ventas de automóviles en China también son un indicio de la desaceleración. Esta merma en el mercado de carros más grande del mundo es la primera desde 1990.
China es, desde hace ya una década, sostén de ventas para los principales fabricantes de automóviles. No es para menos: es un enorme mercado de 1.200 millones de habitantes. Todo ha sido gracias a la clase media, que comenzó a crecer y a tener el dinero para invertir en automóviles.
Para tener una idea: para General Motors y Volkswagen, China genera más ingresos que Estados Unidos o Europa.
En la Bolsa
La contracción comercial de diciembre en China golpeó los mercados asiáticos. Las compañías que cotizan en el índice Hang Seng, de Hong Kong, cerraron el lunes un 1,38 por ciento abajo, mientras que las acciones que cotizan en Shanghai y Shenzhen cayeron un 0,87 por ciento.
Fuente: https://www.merca20.com/