Ciberseguridad: invertir en diversidad e inclusión
La lenta integración de las mujeres en el campo de la ciberseguridad puede deberse a varios factores. Uno de ellos es la baja presencia de mujeres en carreras relacionadas con ciencia, tecnología, ingeniería y matemáticas (STEM), lo que se hace aún más visible cuando se considera una especialización como el campo de la ciberseguridad.
A pesar de que las mujeres están subrepresentadas en puestos gerenciales y ocupan solo el 25% de los trabajos en ciberseguridad a nivel mundial, hay señales positivas. Las mujeres representan el 30% de los trabajadores de ciberseguridad global menores de 30 años y tienen más probabilidades que los hombres de tener maestrías (49% en comparación con 42%).
El estudio Cybersecurity Workforce Study del 2022 realizado por ISC2 muestra que el campo necesita urgentemente más profesionales para proteger a las empresas contra amenazas cada vez más complejas. Las organizaciones están tratando de llenar un vacío mundial de 3.4 millones de trabajadores en ciberseguridad.
Para mitigar esta escasez es importante invertir en diversidad, equidad e inclusión para atraer más talento al campo. El futuro está definido por profesionales que evolucionan y persisten a través del panorama actual cambiante. Los hábitos tradicionales se están rompiendo y diversas perspectivas están entrando al campo mientras la próxima generación utiliza nuevos caminos para impulsar sus carreras.
A mi entender, para atraer fuerza laboral en Ciberseguridad se deben tomar algunas decisiones. Primero, el sector empresarial debería acercarse al sector académico y expresar sus requerimientos y tendencias en ciberseguridad. Formar especialistas en ciberseguridad a través de programas técnicos y habilidades suaves. Segundo, promover modelos de trabajo alternativos (local, a distancia, combinados), y tercero dar oportunidad a jóvenes sin experiencia, con alto potencial y empezar con líneas de preparación.
Para trabajar en Ciberseguridad se necesita de curiosidad, ser persistentes, investigación, búsqueda continua de conocimiento, visión crítica, pensamiento innovador, equilibrio y visión predictiva.
Me encantaría ver más mujeres en este sector de Ciberseguridad que es tan prometedor, que aporta múltiples beneficios a las empresas. Es importante acortar brecha salarial, conocimiento u oportunidades, y fomentar reconocimiento.
Aunque hay desafíos para aumentar la presencia femenina en el campo de la ciberseguridad, también hay oportunidades y señales positivas. Invertir en diversidad e inclusión puede ayudar a mitigar la escasez actual y asegurar un futuro brillante para el campo.
El eslabón más débil en el mundo de la ciberseguridad sigue siendo el ser humano, por ello es importante desarrollar y fomentar habilidades digitales, y las mujeres debemos trabajar en ello.
Por Clery L. Neyra, Vicerrectora de Transformación y Nuevas Soluciones de AIEP.