Comercio Electrónico, oportunidad en medio del covid-19
Sin duda, el comercio electrónico se ha impuesto como el principal canal de compra y venta, producto de la pandemia por el covid-19. De acuerdo a datos de la CCS, éste ha tenido un incremento de casi un 200% en el último año.
Si bien es cierto el comercio electrónico venía con un crecimiento fuerte y constante, el contexto actual de confinamiento obligado ha acelerado la necesidad de las empresas, sobre todo pymes, de comercializar sus productos y servicios a través de Internet de manera rápida, eficiente y segura para poder seguir operando.
En este proceso, ciertamente ha habido mucho acierto y error, pero lo más importante es la capacidad de las empresas de adaptarse para no quedarse en el camino e invertir correctamente sus recursos para dar valor a su negocio. Para eso es vital elegir las soluciones de apoyo digital de manera adecuada, partiendo por herramientas nativas 100% web que sean multiplataformas, fáciles de usar, escalables y que se integren naturalmente a otros sistemas necesarios para operar de manera eficiente.
Un sistema de e-commerce debe estar totalmente adaptado a las necesidades del mercado y sus actores y debe poder integrarse amigablemente para conversar fluidamente, por ejemplo, con los sistemas de gestión para sincronizar el stock y realizar una facturación de todas las ventas de manera sencilla. Asimismo, tiene que contemplar todas las formas de pago disponible, así como un despacho y servicio de post venta impecable. Aquí no se puede fallar, ya que si la experiencia de compra no es satisfactoria y segura, en todo el proceso de compra, desde inicio a fin, el cliente no volverá ni recomendará.
Hoy, el e-commerce da la posibilidad para transformar la dificultad en oportunidad, con el apoyo de diversas herramientas tecnológicas disponibles en el mercado. Es una posibilidad de reinvención y de hacerse un espacio para competir en primera línea. En tiempos adversos, como el actual, es precisamente cuando se tiene que innovar e invertir en la optimización de los recursos empresariales y en todo aquello que permita competir y crecer de manera segura. El comercio cambió y debemos estar totalmente aptos para el siguiente nivel.
Por Diego González, gerente general de Defontana