¿Cómo ayudará a los chilenos ser un país verde?
Los efectos del cambio climático son cada vez más palpables con fenómenos naturales poco comunes, como inundaciones, sequías y temperaturas extremas, que están cambiando las condiciones en las que se desarrolla la existencia de la flora, la fauna, los ciclos productivos de la tierra y nuestro día a día.
Por ello, no solo es necesario, sino vital, que Chile se convierta en un país verde. En este sentido, en el siguiente artículo te explicamos algunas de las ventajas de este cambio de paradigma, si salvar al mundo no es suficiente razón de peso.
Entretenimiento online: solución para disminuir la huella de carbono
En la búsqueda de reducir el impacto ambiental de industrias pesadas o del rápido crecimiento económico, la digitalización de la economía es pieza fundamental para reducir el impacto ambiental.
Entender, y aspirar, a un Chile más verde es imposible sin la digitalización, ya que esta facilita la implementación de soluciones innovadoras para mitigar los estragos causados por el cambio climático.
El impulso del comercio electrónico en Chile son una muestra de cómo es posible transformar toda una industria y ayudar con el medio ambiente.
Migrar hacia una economía digital ha permitido a los chilenos puedan disfrutar de experiencias totalmente inmersivas, como las que se presentan en los juegos de casino en vivo, sin necesidad de salir de casa; lo que contribuye a reducir la huella de carbono sin dejar el entretenimiento a un lado.
La gran alternativa verde
Sin duda alguna, la energía verde favorecerá la calidad del aire, ya que al ir reemplazando los vehículos de transporte público y, más adelante, los vehículos particulares, se reducirá considerablemente la emisión de gases contaminantes derivados de los combustibles fósiles.
Esto se traducirá en menos contaminación atmosférica y, en consecuencia, en menor incidencia de enfermedades respiratorias, por lo que habrá una mejora significativa en la calidad de vida en espacios urbanos y se aliviará la abarrotada salud pública.
Hidrogeno verde: un camino más limpio
El hidrógeno verde es una alternativa limpia y sostenible al hidrógeno tradicional. Este se produce utilizando energía renovable, como la solar o eólica, para ser obtenido por electrólisis. El hidrógeno verde no emite CO₂ durante su producción, por lo que es la primera opción para movernos hacia una economía baja en carbono.
Otro aspecto del hidrógeno verde que beneficiará la salud de los chilenos es el acceso al agua potable para todos. Actualmente, las principales industrias del país son los combustibles y la minería, ambas actividades extractivas, que son una constante amenaza que afecta las fuentes hídricas y la calidad de los suelos.
La incorporación de la energía verde minimiza la liberación de residuos inorgánicos (metales pesados) que son altamente tóxicos y perjudican gravemente la salud. Esto afectará directamente a la agricultura, pues disminuirá el riesgo de contaminación tanto en el agua como en el suelo.
Más verde, más empleos
El estímulo que está generando la transición energética en la economía chilena es realmente impresionante, pues ha incentivado a la inversión en varios proyectos que traerán consigo miles de empleos verdes en diversas áreas para implementar y concretar el objetivo: el desarrollo de la industria del hidrógeno verde.
Retos que enfrenta el Chile verde
Si bien toda la estrategia y planificación que hay detrás del proyecto de la nación austral son ambiciosas y muy prometedoras, se debe prever que este es un largo camino lleno de desafíos por superar para pasar de ser un piloto a una escala industrial.
Poco se habla de los riesgos inherentes a la consecución de los objetivos, uno de ellos es descarbonizar la matriz energética del país para el año 2025, que implicará el cierre de 28 centrales de carbón. ¿A dónde irán todos estos empleados? ¿Se les capacitará y reinsertará en naciente industria verde?
Todo cambio supone una oportunidad para innovar y crear nuevas realidades que promuevan la economía circular. Chile tiene un enorme potencial y condiciones favorables, pero hay que tener en cuenta la preservación de la biodiversidad de su geografía y la tecnificación de la mano de obra.