Dólar se desploma y registra su peor caída desde 2009
Los economistas estiman que la moneda estadounidense no seguiría fuerte por mucho tiempo, siempre y cuando se cumplan ciertas condiciones. En primer lugar, que se disipen riesgos geopolíticos.
Un dólar fuerte es lo que quiere el presidente de Estados Unidos, Donald Trump. Así lo aseguró en enero de este año, y su deseo se ha hecho realidad, al menos por ahora. Sin ir más lejos, desde que Trump manifestó lo anterior, la moneda norteamericana se ha apreciado 3,8% contra las principales divisas del mundo, lo que ha hecho temblar a las monedas emergentes.
El Dollar Index alcanzó ayer su mayor nivel desde el 27 de diciembre de 2017, y entre las monedas emergentes el peso chileno se convirtió en la divisa más depreciada de la sesión. De hecho marcó su mayor caída diaria en tres meses tras retroceder $7,6 (-1,22%) frente a la moneda norteamericana.
“La tendencia que ha mostrado el dólar puede cambiar, porque el origen de esta apreciación es un tema geopolítico, y por lo general éstos terminan pasando, de lo contrario, la magnitud de la fortaleza del dólar sería mucho mayor”, comenta Felipe Alarcón, economista de EuroAmerica.
“La situación de nerviosismo ha hecho que el dólar se haya fortalecido frente al resto de las monedas”, puntualiza Nathan Pincheira, economista de Fynsa. Pero no sólo los temas geopolíticos han impulsado al tipo de cambio a nivel global, también lo han hecho los datos más débiles de lo esperado en la Eurozona, comenta.
No obstante los datos decepcionantes que ha mostrado la Eurozona, esta tendencia no se mantendría por mucho más, según cree el economista jefe de Bice, Sebastián Senzacqua. En esa línea, apunta que la Eurozona debería mostrar una dinámica mas favorable en la segunda mitad del año.
En tanto, para Credicorp no es tan claro si el dólar mantendrá su fortaleza, o revertirá la tendencia. Pablo Cruz, economista senior de gestión de activos de Credicorp, aclara que la fortaleza económica de EEUU versus el resto de las economías desarrolladas, esta en línea con el dólar apreciado que hay actualmente, sin embargo, cuando se resuelvan temas comerciales y geopolíticos la divisa norteamericana podría depreciarse.
A los riesgos geopolíticos, comerciales, y la debilidad de economías desarrolladas como la Eurozona, hay que sumar que “el fortalecimiento de la expectativa de próximas alzas de tasas en EEUU se ha elevado de forma significativa”, dice Moncado. En esa línea, comenta que es probable que el tipo de cambio global se mantenga en los niveles actuales, para luego ajustarse a la baja de acuerdo a la internalización de expectativas del actuar de la Fed. De hecho, ve que la moneda a fin de año estará en $610.
Con todo, ayer no sólo se movió el peso chileno: el euro frente al dólar alcanzó su menor precio desde el 28 de diciembre del año pasado. Entre los mercados emergentes, el dólar frente al sol logró su mayor precio desde el 19 de diciembre de 2017, y frente al real anotó su mayor nivel desde el 2 de junio de 2016.