Los desafíos tributarios de las Pymes

Los desafíos tributarios de las Pymes
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La reconocida abogada, Soledad Recabarren, habla de lo que ha significado la
Modernización Tributaria, los regímenes Pro Pyme y las medidas de apoyo a
favor de las empresas más pequeñas.

El 27 de abril, el Servicios de Impuestos Internos comunicó que el pago que debe hacerse en la Operación Renta se posterga hasta el 30 de junio, debido a la petición de la Cámara de Diputadas y Diputados, gremios empresariales,
Colegio de Contadores de Chile y el Centro de Estudios de Legislación Empresarial y Tributaria, CELET, que preside Soledad Recabarren, no aceptando postergar la declaración (pero el mismo 30 de abril -último día para declarar- el Ministerio de Hacienda  informó que el proceso se extiende hasta el 31 de mayo).

Soledad Recabarren es abogada, especialista en materia tributaria, socia del estudio jurídico Recabarren y Asociados, Coordinadora Académica de Magíster en Derecho Tributario de la Pontifica Universidad Católica de Chile, fundadora y presidenta de CELET.

Tiene una amplia trayectoria como jurista, profesora de educación superior y asesora de grandes, medianas y pequeñas empresas. Frecuentemente, es consultada por los medios de comunicación, sobre todo, durante las últimas
reformas tributarias. De hecho, en estas semanas ha sido entrevistada por el impuesto a los superricos y por la Operación Renta AT 2021, entre otros temas.

Preguntamos a la experta sobre este último proceso, cuál era su diagnóstico de como las Pymes estaban afrontando la declaración anual de impuestos a sus ingresos y qué problemas se les habían presentado. Al respecto, afirmó que “este año, las Pymes han tenido cambios relevantes en su sistema tributario. Además, no han podido funcionar con normalidad, lo cual en muchos casos les ha generado grandes pérdidas”.

Agrega que “sus contadores se han visto impedidos de concurrir a las empresas para levantar la información, debido a las cuarentenas. Y recién el 15 de abril, la autoridad declaró que son profesionales de actividades esenciales, las cuales pueden desarrollarse presencialmente durante el estado de emergencia”.

“Estos factores han hecho que sea una Operación Renta muy complicada. Si a esto le sumamos que en forma muy tardía se dictaron las instrucciones, el proceso se ha vuelto muy complejo”, evalúa.

Sobre por qué había impulsado y adherido a la solicitud de aplazar la Operación Renta, señala que “por tres razones. La primera, es que a última hora muchos contribuyentes Pymes vieron cambiadas, sin causa alguna, en la página del SII, el régimen tributario al que se acogieron por su volumen de ventas.  La segunda, es que los contadores al no ejercer una actividad esencial (dos semanas después de iniciarse el proceso de Operación Renta se revirtió esa decisión y fueron declarados esenciales), se vieron impedidos de juntarse con sus clientes y en consecuencia no podían acceder a esta información. Esto se vio agravado porque el Colegio de Contadores, de acuerdo a un estudio que realizaron, ha señalado que un gran porcentaje de sus asociados atiende un promedio de 50 Pymes cada uno.  La tercera, es que el SII fue encomendado por el gobierno de diseñar y poner en marcha los Bonos para la Clase Media. Esto implica un fuerte trabajo para los funcionarios del SII y sobrecarga de la plataforma, lo que imposibilita presentar la declaración de impuestos”.

Nueva Reforma

Referente si estaba de acuerdo con la última reforma tributaria, que empezó a aplicarse en el 2020, reflexiona que “la Modernización Tributaria dejó en mucho mejor pie a las Pymes, que la reforma del año 2014 y su simplificación del 2016. Sin embargo, hubo algunas situaciones que se podrían haber mejorado. Por ejemplo, no fue aceptado el hecho de que una empresa que se dedique al arriendo de inmuebles pueda ser parte del Régimen Pro Pyme, siendo que factura menos de 75.000 UF. Esto es uno de los pocos casos en que una Pyme, por su objeto social, no puede acogerse a este régimen tributario”.

Sobre por qué se creó un régimen Pro Pyme Transparente y otro General, Soledad Recabarren explica que “el primero se ideó pensando en los microempresarios, porque todo lo que ganan lo consumen, debido al nivel de
ingreso están normalmente en el tramo exento. Entonces, si lograban liberarse del impuesto de primera categoría, no tenían que pagar un impuesto con tasa de 25%, sino que sólo pagaban impuesto global complementario y si quedaban en el tramo exento, terminan no pagando impuesto a la renta. El régimen general, en tanto, se pensó para contribuyentes Pymes que tienen la capacidad de ahorrar, comprar maquinarias, situaciones en las que conviene tener contabilidad, aplicar depreciación, además tiene la posibilidad de rebajar parte de lo que reinviertes en activos fijos en el resultado tributario de la empresa”.

En este sentido, sobre como evalúa los regímenes Pro  Pyme General y Pro Pyme Transparente, comenta que “han mejorado. Pero aún puede hacerse mucho más. Por ejemplo, hacer instrucciones que simplifiquen los registros y no
como salieron las primeras resoluciones sobre control de ingresos, en la cual el SII ponía muchas más obligaciones, que las que establecía la ley, lo que obligó a cambiar posteriormente estas instrucciones”.

“Creo que aún hay mucho por hacer por los microempresarios. Sobre todo, porque en este nivel de ventas existen muchos empresarios informales”, subraya.

Medidas a favor de las Pymes

Respecto a los beneficios tributarios que la autoridad dispuso en el 2020 para las Pymes, dice que “el haber bajado la tasa del impuesto de primera categoría a un 10%, se agradece. Dada la crisis, es altamente probable que los empresarios Pymes soliciten devolución de los PPM efectuados. Múltiples estudios, basados en la información publicada por el SII, permiten concluir que la gran mayoría de los empresarios Pymes, se encuentran exentos del pago de impuesto global complementario, con lo cual los PPM en el sistema transparente resultan excesivos y en el régimen simplificado Pro Pyme, se debe solicitar la devolución de los impuestos pagados en exceso”.

Sobre qué otras medidas hubiera implementado para apoyar a las empresas más pequeñas, en esta crisis sanitaria y económica, de acuerdo con su experiencia de trabajar con y por las Pymes, Soledad Recabarren indica que “creo que en los créditos FOGAPE, habría sido mejor una tasa de interés un poco más alta y una garantía estatal del 100% para las Pymes. En tanto, garantías mucho más bajas para las grandes empresas. Esto es, porque gran parte de los créditos, por tema de riesgo, no fueron destinados a las Pymes”.

Comenta que cuando se masifica una medida, se pierde el sentido. Tal como sucedió con la ley de Pago a 30 Días, que se creó para proteger y beneficiar a las Pymes, pero en el Congreso se extendió a las grandes empresas. En el mismo sentido, cuando fue la discusión de la Reforma Tributaria en el Congreso, la abogada cuenta que solicitaban que las grandes empresas pudieran participar en las Pymes, como un mecanismo de fomento, que estuviera bajo medidas de control. En términos tales que si la Pyme crecía, la gran empresa ganara plata. Pero si no crecía, la pérdida no fuera tan significativa. No obstante, en la reforma del 2014, se dijo que si una empresa grande participaba en una Pyme, esta dejaba de serlo. Entonces propusimos que la empresa grande sólo tuviera participación hasta determinado porcentaje. Lo que dijo el gobierno en esa oportunidad fue que se permitirá a aquellas grandes empresas, que deseen participar en Pymes, como una forma de fomentar su crecimiento, se inscriban en un registro que llevará la Corfo. Sin embargo, aún no salen los instructivos para que la Corfo administre tal registro. “Algo pasó, al tratar de hacerlo muy masivo, se perdió el foco donde se deseaba apoyar”.

En tanto, si hubiese considerado como buena idea un subsidio directo a las Pymes, la experta responde que “creo que en general la entrega directa es mucho mejor que los sistemas excesivamente abiertos. Decíamos que se podría
haber creado algunos fondos de inversión, a lo mejor con patrocinio estatal. O crear algún organismo que pueda hacer algún salvataje de las Pymes. En el año 82, cuando los bancos estuvieron a punto de quebrar, el Estado los capitalizó. Después tuvieron que pagar este aporte de capital al Estado, recomprando la participación. Entonces, por qué no, a través de Corfo u otro organismo estatal, no creamos un salvataje, similar al que se hizo con los bancos, ahora para las Pymes. En 1982, se necesitó mucha plata para pocos bancos, pero hoy se requiere menos dinero para muchísimas Pymes, en términos tales que si las Pymes crecen puedan comprar el capital que recibió. Si a la Pyme le va mal, el inversionista podrá compensar esta pérdida con las utilidades, que le generen otras inversiones”.

El Valor de CELET

El Centro de Estudios de la Legislación Empresarial y Tributaria, CELET, es una fundación chilena sin fines de lucro, que busca aportar a la justicia social, a través de apoyos directos e indirectos a las Pymes en materias de legislación empresarial y tributaria.

Soledad Recabarren es una de sus fundadoras y  su actual presidenta.

Consultada acerca de la importancia de esta iniciativa, responde que “creamos CELET, porque nos dimos cuenta de que los empresarios Pymes no podían optar al beneficio de pobreza que da la Corporación de Asistencia Judicial, para acceder a asesoría o defensa judicial. Por otra parte, tampoco pueden pagar asesoría y defensa de alta calidad.”

“Por ello que en CELET hemos logrado que los mejores asesores tributarios del mercado se hayan comprometido a dar asesoría y defensa gratuita a las Pymes, sean estas recomendadas por las asociaciones gremiales, con las que nos hemos unido, como la CONAPYME y sus gremios, la Multigremial, la ASECH y la Cámara Nacional de Comercio, o bien en forma particular”, explica.

“Nuestro compromiso es dar apoyo, asesoría y defensa tributaria y comercial de excelente calidad a las Pymes, y para ello nos pueden contactar en nuestra página web  <https://www.celet.org/https://www.celet.org/, o en n
<https://www.linkedin.com/company/celet/?originalSubdomain=cl> uestra página de LinkedIn”, invita.

Al finalizar la entrevista, entregó un consejo a las Pymes. “que pregunten, que pidan ayuda a sus mismas asociaciones gremiales y planteen sus problemas.

POR PROPYME

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