CPC advierte que alza de cotización en 4,2 puntos podría destruir 60 mil empleos y bajaría recaudación fiscal
También proyectó que los salarios caerían 1%. Gobierno admitió efectos en mercado laboral, aunque dijo que se está cuidando «que sea lo menos posible».
Anticipándose al informe de productividad de la reforma previsional -texto en el que los ministerios de Hacienda y del Trabajo deben proyectar los efectos en el mediano plazo de la iniciativa en la economía-, el presidente de la Confederación de la Producción y del Comercio (CPC), Alfonso Swett, entregó los propios cálculos que ha hecho el gremio respecto del impacto del proyecto del Gobierno.
Una de las primeras proyecciones que hizo Swett apunta a que el aumento de la tasa de cotización para capitalización individual de 10% a 14% con cargo al empleador, y de 0,2 puntos para el seguro de dependencia, podría tener un impacto de pérdida de 60 mil empleos en régimen, debido al mayor costo de contratación. «El número de los 60 mil puestos de trabajo es en régimen, es decir, a 8 años», advirtió Swett, precisando que «esta es una reforma que se hace cargo de este desafío y por eso su implementación será gradual».
Desde el gremio explican que el cálculo se realizó sobre la base de una elasticidad de la demanda de 0,4 puntos; una elasticidad de la oferta de trabajo de 1,3; el alza de cotizaciones de 4,2%, y una cantidad de asalariados privados de 4 millones 767 mil personas a agosto de este año. Con los datos anteriores se proyectó la variación de las remuneraciones, lo que multiplicado por el alza de la cotización, arroja una caída de los salarios del 1%.
Puntualizan que con esa variación de los salarios se calculó el impacto en empleos, lo que se traduce en 61.971 puestos de trabajo menos en 8 años más.
Swett precisó que «como sector empresarial, haremos el mejor esfuerzo para que este número no se haga realidad». Añadió que «esto hace que sea urgente avanzar hacia una legislación laboral más moderna, flexible, que esté en sintonía con los desafíos del mercado laboral en la era digital».
El informe de productividad de la reforma a las pensiones que envió en 2017 el gobierno de Michelle Bachelet previó una pérdida de hasta 394 mil puestos de trabajo, si es que el aumento de la cotización a 15% que proponía esa iniciativa fuera inmediato.
Más temprano, en T13 radio, Swett también advirtió que el aumento en los costos para las empresas por la mayor cotización implicará menos utilidades y, por tanto, un menor pago de impuestos. Proyectó que cada punto adicional de cotización se traducirá en US$ 150 millones de menor recaudación para el fisco. «Solamente en términos tributarios, por menores ingresos, estos son en torno a US$ 650 millones a US$ 700 millones, y si se agrega el alza que va a tener el Estado en términos de los trabajadores que hoy día tiene, podríamos agregar otros US$ 750 millones más, y si a eso le agregamos los US$ 1.100 millones que va a costar el Pilar Solidario, la verdad es que aquí estamos haciendo todos un esfuerzo bastante importante», dijo.
El ministro de Hacienda, Felipe Larraín, reaccionó, diciendo que «hemos cuidado el efecto de esta reforma en el mercado laboral».
El titular del Trabajo, Nicolás Monckeberg, afirmó que el Gobierno tiene una agenda de políticas públicas que compensa este costo laboral.