por
vía
legal
Problemas que aborda
Krausz explica que el Protocolo Familiar es un documento de la fami-
lia, privado y confidencial orientado a los negocios familiares, el cual
tiene carácter moral y su finalidad es preventiva.
“Tiene por objeto regular una serie de materias que pueden afectar el
correcto funcionamiento, crecimiento y estabilidad por falta de profe-
sionalización, de comunicación, de reglas y normas, de equidad. Es
necesario poseer liderazgos claros, establecer compromisos y analizar
profundamente temas que potencialmente pueden causar conflictos al
interior de la propiedad y generar quiebres en el gobierno corporativo,
o en la dirección de los negocios”, añade el jurista de AEMAbogados.
Las empresas familiares son la manera más innata de crear una compañía.
De acuerdo con el estudio “Radiografía de empresas familiares en Chile”,
realizado por el Comité de Políticas Públicas de la Universidad del Desarro-
llo (UDD), al menos cuatro de cada cinco empresas en el país son familiares
(78%).
Pero estas cifras positivas, tienen sin duda sus bemoles y es que continuar
una buena senda al interior de las empresas, cuando se mezclan intereses
económicos con temas familiares puede ser sin duda todo un reto.
El experto en Gobierno Corporativo, el abogado de AEM, Alan Krausz re-
comienda que para evitar conflictos, las empresas deben pensar en un Pro-
tocolo Familiar.
“El documento es una reglamentación de cómo la familia se relaciona con
la empresa establece el funcionamiento de las empresas, reglas claras y ayu-
da en el tránsito generacional de una manera adecuada para preservar los
intereses familiares”.
Este tipo de textos principalmente regula:
- Los principios y valores que guían las relaciones entre los familiares, sus
emprendimientos (negocios), y la propiedad de los mismos.
- Las relaciones económicas y profesionales entre los familiares, accionistas
y la empresa.
- La forma de resolver los conflictos.
¿Qué es un protocolo familiar?
La mayoría de las empresas en Chile son empresas familiares y por ello pensar en
reglas claras es clave a la hora de que estas perduren en el tiempo.
El establecer criterios comunes, aceptados por las familias involucradas en un negocio,
son una forma eficaz para prevenir conflictos y tener fórmulas que permitan, en caso
de darse, solucionarlos.